1.- Lavarse las manos. – Hacerlo frecuentemente es beneficioso debido a que es la forma más sencilla y económica de deshacerse de los gérmenes.
2.- No tocarse la cara. – Los virus ingresan al cuerpo por la nariz, la boca y los ojos. Enseñe a sus hijos a mantener las manos lejos de estas áreas.
3.- Tener presente la vacunación. – Ayuda a prevenir enfermedades estacionales que aparecen en invierno (Influenza, Sincitial)
4.- Llevar una dieta saludable. – Consumir frutas y verduras. Esto ayudará a estimular el sistema inmunológico.
5.- Dormir las horas adecuadas. – Se dice que la privación del sueño duplica el riesgo de enfermarse de resfrío o gripe.
6.- Mantener la actividad física. – Mantener la energía y controlar el estrés, que es doblemente importante durante la temporada de resfriados y gripe.
7.- Respetar las normas de guarderías y colegios. – Estas indican que los niños con síntomas de enfermedad dejen de asistir para evitar el contagio de otros menores.
8.- No compartir cubiertos ni vasos. – Tenga buenos hábitos de limpieza.
9.- Cubrirse al toser y/o estornudar. – Utilice papel descartable o el pliegue del codo a la hora de estornudar.
10.-Ventilar los ambientes para eliminar el virus. – Los lugares hacinados o cerrados son ideales para la propagación de gérmenes. Mantenga las ventanas abiertas por la mañana.