El tiempo pasa volando, y casi sin darnos cuenta estamos a las puertas del final de curso. Antes de las esperadas vacaciones de verano, los niños tendrán que hacer frente a los temidos exámenes. ¡Que no cunda el pánico! Silvia Álava Sordo, psicóloga y autora del libro “Queremos hijos felices”, te da algunas ideas para ayudarles a superarlos.
Motívales
Lo ideal es que los niños estén motivados por sí mismos a aprender y a estudiar, pero muchas veces encuentran otras actividades que les apetece más hacer. Por eso, los padres deben poner los estudios como una prioridad y enseñarles que después de terminar las tareas ya se pueden poner a jugar o a hacer otra cosa.
Ayuda de los padres
Aunque muchas veces los padres sienten la obligación de ayudar con las tareas del colegio, esto es un error. “Es importante trabajar la autonomía de los niños”, explica la psicóloga. Los deberes son su responsabilidad y tienen que hacerlos ellos solos. Mamá y papá podrán ayudarles después a resolver las dudas que les hayan surgido.
Crea el entorno perfecto
Hay cinco factores clave para lograrlo: hacer los deberes en el mismo sitio, ponerse con ello siempre a la misma hora, que sobre la mesa solo tengan lo que necesiten para estudiar (sin móviles, juguetes u otras distracciones), que la tele esté apagada y que adopten una postura correcta.
¿Cuántas horas?
Cuando los niños son más pequeños lo importante es trabajar el hábito, por lo que bastaría con entre 20 y 25 minutos diarios. Según van creciendo, ese tiempo irá aumentando dependiendo de los deberes y exámenes, por lo que los padres deben estar pendientes.
Muy utilez